Kinstong, 23 de abril de 1878.
Dirigido a J. Bellido de Luna.
“No era de extrañar que el convenio celebrado el 10
de febrero entre cubanos y españoles para poner término a la guerra que hacía
nueve años ensangrentaba a la isla de Cuba; causara tristísima impresión en el
ánimo de los que siempre pensamos que
sería un hecho la independencia del país”.
Advertencia
"Parece que la opinión de muchos, es, que he representado el principal
papel en aquel asunto.....”.
Así da comienzo el extenso expediente que a modo de relato fue enviado a imprenta (propiedad
de Pedro A. Pomier), del cual se posee una copia manuscrita en el Archivo
Histórico Provincial de Santa Clara, Villa Clara, escrito a pocos días de haber llegado a Jamaica a principios del año 1878 el ilustre general
mambí.
Sólo a este ilustre general cabe el pensamiento:
“ …aceptaré
sumiso cualquiera que sea el fallo que sobre mí recaiga, pero mientras tanto
rechazo y protesto contra toda inculpación que se me quiera hacer, aunque no
sea más que la sencilla razón de que no le concedo á ningún cubano más interés
que el que he tenido por conseguir la independencia
de Cuba, no obstante de ser un extranjero”.
El relato desde la perspectiva del soldado, se
inicia a partir del año 1871, exponiendo los principales
acontecimientos que en orden acumulativo fueron degradando la campaña y los
nobles intereses por la independencia, para concluir con las más profundas
aseveraciones desde su pensamiento militar:
“Largo tiempo hacía que estaba en la mente de todos
la necesidad de un Jefe Superior Militar que imprimiera unidad de acción al
ejército é hiciera que la disciplina no fuese una ilusión; más, ambiciones por
una parte y temores á la dictadura por otra no permitieron que la revolución
tuviese un hombre que la dirigiese siendo esta en mi concepto una de las
principales causas de su pérdida “.
Para luego concluir:
“ Dirigidos por un gobierno puramente civil obra de
una cámara de representantes que
coartaba los medios de acción al Ejército privándole de libertad, su existencia
corría efímera y triste y solamente a los esfuerzos tiránicos de los jefes militares
debió su existencia; no se oía allí la voz del militar que manda al soldado al
combate, solo la palabra del Diputado que defendía los derechos del pueblo; se
habían puesto en práctica bellísimas teorías; establecido instituciones
democráticas y constituido en fin una
República; todo bellísimo, más en mi opinión no se debía estar por lo bello
sino por lo útil, porque se exponía la Revolución á morir de consunción con sus lujosas
galas de leyes y democracia: se necesitaba ejército y era lo que no se trataba
de hacer, se pusieron en practica y con tal entusiasmo las doctrinas democráticas republicanas que en poco tiempo
era ficticia la disciplina y la obediencia convencional “.
Se anexan además copias manuscritas de varios documentos:
Documento 1.
19 de agosto de 1875.
Dirigido por Tomás Estrada Palma a Máximo Gómez.
Documento 2.
31 de marzo de 1876. Dirigido por Máximo Gómez al
Secretario de la Guerra
del Gobierno de la República
en Armas.
Documento 3.
28 de marzo de 1876. Dirigido por Máximo Gómez al Secretario de la Guerra.
Documento 4.
17 de marzo de 1876. Dirigido por el Coronel
Francisco Jiménez al Presidente de la República en Armas.
Documento 5.
22 de junio de 1876. Dirigido por Máximo Gómez al
Presidente de la República
en Armas.
Documento 6.
4 de agosto de 1876. Dirigido al Teniente Coronel José Gómez, por el Comandante Ángel
Tasmanio, Capitán Miguel Alayón y el Teniente Felipe Rodríguez.
Documento 7.
10 de septiembre de 1876. Indultos en ocasión del
Octavo Aniversario de la inicio de la gesta independentista.
Documento 8.
18 de marzo de 1877. Dirigido al Mayor General
Vicente García por Máximo Gómez.
Documento 9.
18 de marzo de 1877. Dirigido al Mayor General
Vicente García por Máximo Gómez.
Documento 10.
19 de marzo de 1877. Dirigido por el Mayor General Vicente
García a Máximo Gómez.
Documento 11.
20 de marzo de 1877. Dirigido por Máximo Gómez al
Mayor General Vicente García.
Documento 12.
30 de marzo de 1877. Dirigido por el Mayor General
Vicente García a la Cámara
de Representantes del Gobierno de la República en Armas.
Documento 13.
6 de abril de 1877. Dirigido por la Cámara de Repr5esentantes
del Gobierno de la República
en Armas al Mayor General Vicente
García.
Documento 14.
3 de octubre de 1877. Dirigido por Máximo Gómez a la Cámara de Representantes
del Gobierno de la República
en Armas.
Documento 17.
3 de octubre de 1877. Acuerdo de la Cámara de Representantes
aprobando la renuncia del Mayor General Máximo Gómez.
Imprenta de Pedro A. Pomier.
No. 12, S .E. Corner
of Orange Street and Water Lane.
Kinstong, Jamaica.
Fondo: Colección Manuel García Garófalo. Archivo
Histórico Provincial. Santa Clara. Villa Clara. Cuba. Expediente: 330. Legajo:
6.
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